Sabi Ortiz, hijo del expresidente municipal de Metlatonoc, Felipe Ortiz Montealegre, fue asesinado a balazos en el poblado de Loma Bonita.
Sabi Ortiz fue baleado en el poblado de Loma Bonita, en Metlatonoc. Foto: Cortesía
CHILPANCINGO, Gro. (apro).– Sabi Ortiz, hijo del expresidente municipal de Metlatonoc, Felipe Ortiz Montealegre, fue asesinado a balazos este viernes.
En la víspera fue baleada la vivienda del presidente municipal de Cualac, Hazael Aburto Ortega.
La mañana de este sábado, el exedil de Metlatonoc, Felipe Ortiz, dio a conocer el hecho en su cuenta de Facebook:
“Ayer fue cobardemente asesinado mi hijo Sabi Ortiz Díaz en el poblado de Loma Bonita, municipio de Metlatonoc.”
Se trata del ingeniero civil Sabi Ortiz, quien fungió como secretario de Obras Públicas en el gobierno municipal de Chilpancingo en el 2021, último año de gobierno del alcalde perredista Antonio Gaspar.
Actualmente el joven se dedicaba a la construcción de obras en la región.
Los primeros reportes indican que el crimen se registró la noche de este viernes 14 en la comunidad Loma Bonita, cerca del punto conocido como Llano de la Rana, donde el ingeniero fue atacado con disparos de arma de fuego.
El padre de la víctima, Felipe Ortiz Montealegre, es un conocido e influyente político del PRD en la región. Fue alcalde de Metlatonoc de 1990 a 1993, diputado local de 2005 a 2008 y presidente del Comisariado de Bienes Ejidales en 2019.
Un día antes, Felipe Ortiz publicó un desencuentro que tuvo con el entonces presidente estatal del PRI y después gobernador de Guerrero, Rubén Figueroa Alcocer, durante un conflicto por electoral luego de que le arrebató la presidencia municipal al tricolor.
“Llegó Figueroa (en marzo de 1990) en helicóptero a Metlatonoc, según a solucionar el problema, nos reunimos una comisión del Ayuntamiento perredista y del PRI, y me dice que entregue la Sindicatura y puestos administrativos para que desocupen el palacio.”
Aseguró que se negaron y un mes después volvió a arribar en helicóptero y con la misma propuesta. Fue cuando el alcalde le dijo a Figueroa que su presencia atizaba más el conflicto y este le habría respondido:
“Contestándome que si no tenía miedo a que me venadiaran (le tendieran una emboscada) detrás de un ocote o una piedra ahí me dejaba con el problema y se retiró”, reveló una parte del texto del perredista.
Se desata la violencia postelectoral
En el proceso electoral fueron 15 las familias enlutadas en Guerrero. Aspirantes, candidatos y familiares cercanos a estos fueron asesinados.
Sólo en el caso del candidato de Coyuca de Benítez, José Alfredo Cabrera, se vinculó a proceso a un presunto responsable que tres días después fue hallado muerto en su celda en el penal de Acapulco.
En las dos semanas después de la elección se han desatado una serie de ataques contra políticos.
El viernes 7 de junio en Tixtla, municipio de la zona Centro, fue asesinada a tiros al salir de su casa la regidora Esmeralda Garzón Campos. La edil fue postulada por el PRI y en la campaña apoyó a los candidatos locales y federales de Morena.
El jueves 13, el exregidor de Atoyac en la Costa Grande de la entidad, Juan Carlos Tellez Reyes, sufrió un atentado cuando circulaba en su automóvil por el centro de esa ciudad junto a su esposa, Diana N, quien murió en el ataque.
Y la madrugada de este viernes 14, la casa del alcalde de Cualac, municipio de la región Montaña, Hazael Aburto Ortega, y una tortillería de su padre fueron atacadas con armas largas de manera simultánea. No se reportaron víctimas.
En octubre de 2023, el edil escapó de sus agresores que ingresaron armados a un hotel en la cabecera municipal de Olinalá, donde estaba hospedado.