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Más de 2 mil 500 niños, en riesgo de ser reclutados: Informe “Niñeces frente a las violencias criminales en Chiapas”

Más de 2 mil 507 niños, niñas y adolescentes, en su mayoría de comunidades indígenas de San Cristóbal de las casas y la zona de los altos de Chiapas se encuentran en riesgo de ser reclutados por el crimen organizado, alertó la organización Melel Xojobal, en su informe “𝗡𝗶𝗻̃𝗲𝗰𝗲𝘀 𝗳𝗿𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗮 𝗹𝗮𝘀 𝘃𝗶𝗼𝗹𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮𝘀 𝗰𝗿𝗶𝗺𝗶𝗻𝗮𝗹𝗲𝘀 𝗲𝗻 𝗦𝗮𝗻 𝗖𝗿𝗶𝘀𝘁𝗼́𝗯𝗮𝗹 𝗱𝗲 𝗟𝗮𝘀 𝗖𝗮𝘀𝗮𝘀, 𝗖𝗵𝗶𝗮𝗽𝗮𝘀”presentado el pasado 23 de febrero.

La organización que trabaja con niñeces y adolescencias de los pueblos originarios de Chiapas, realizo una ardua investigación ante la necesidad de entender la realidad y escenarios de despojo en la que se encuentran actualmente las infancias en esta región, donde la violencia se ha recrudecido en los últimos años por las disputas territoriales entre grupos criminales que operan en esta zona.

Durante la presentación señalaron que la mayoría de las víctimas de reclutamiento forzado en Chiapas tienen un promedio de edad entre 15 y 21 años y son en su mayoría de los pueblos tsotsil y tseltal. Una vez dentro de las pandillas o los grupos del crimen organizado, los jóvenes son obligados a hacer mandados, vender y transportar drogas, reclutar a otras personas y realizar labores de vigilancia o coyotaje. En el caso de las mujeres, son obligadas a hacer la limpieza y ser meseras en cantinas o bares, hasta ser víctimas de explotación sexual.

“Algo que nos preocupa es que estos grupos criminales sean convertido en actores que brindan a las niñeces y juventudes posibilidades de movilidad social, de pertenencia, de arraigo y como las escuelas, las familias, los barrios no estamos logrando generar estos condiciones de arraigo territorial y protección, donde evidentemente el estado no está siendo un contrapeso contra estos grupos criminales que siguen creciendo sus filas con infancias y adolescencias” aseguró Jennifer Haza Gutiérrez, directora de Melel Xojobal.

De acuerdo con los realizadores, es necesario atender las detonantes de la violencia, como la desigualdad social, el racismo y la exclusión social, a través de la promoción de acceso a servicios básicos de salud, saneamiento, educación, empleo, y urgieron impulsar acciones de atención y prevención de las autoridades responsables de garantizar una vida libre de violencia para las infancias.