Consultamos a expertos sobre por qué tosemos y tenemos mayor mucosidad nasal cuando nos vamos a la cama, y qué hacer para dormir mejor. Ilustración: Emanuela Carnevale
Esta es una traducción hecha por El Diario de la nota Why Cold Symptoms Are Worse at Night, original de The New York Times.
Estamos en la temporada de resfriados y gripe, lo que significa que es muy probable que estés rodeado de gente tosiendo y con la nariz goteando. Eso si no eres tú mismo el que está tosiendo activamente.
Si tu principal queja es la tos, la fiebre, el dolor de cabeza o una nariz que moquea y está congestionada, es posible que notes que tiendes a sentirte peor por la noche.
Pero no es tu imaginación. Varios factores inciden en eso, comenzando por tu ritmo circadiano, que es el reloj interno de tu cuerpo. Cuando oscurece, le indica a tu cerebro que se relaje para dormir y, al mismo tiempo, estimula que ciertas células inmunitarias se vuelvan más activas. Cada noche, esas células son reclutadas a diferentes partes de tu cuerpo, en busca de patógenos invasores como virus y bacterias.
«Cuando identifican y tratan de combatir los virus, las células inmunitarias pueden causar irritación e inflamación, lo que termina empeorando los síntomas respiratorios por la noche”, explicó el doctor Diego Hijano, especialista en enfermedades infecciosas pediátricas en el Hospital de Investigación Infantil St. Jude.
Ciertas hormonas, como el cortisol, también siguen un ritmo circadiano. Los niveles de cortisol son más altos por la mañana, lo que puede ayudar a suprimir la inflamación durante el día y, a su vez, reducir los síntomas. A medida que los niveles de cortisol comienzan a disminuir por la noche, los síntomas pueden volver a aparecer.
Otro factor que puede empeorar los síntomas de tos y resfriado por la noche se llama goteo posnasal, la mucosidad que comienza a acumularse en la parte posterior de la garganta cuando estás acostado.
“A lo largo del día, la acumulación de mucosidad es menos problemática porque la gravedad ayuda a drenarla cuando estás de pie y te mueves”, señaló Juan Chiriboga-Hurtado, especialista en medicina familiar en Keck Medicine de la Universidad del Sur de California. Pero por la noche, la mucosidad puede acumularse y activar tu instinto de toser y despejar las vías respiratorias.
La falta de distracciones, que suele ser buena para dormir, también hace que sea más difícil ignorar tu garganta irritada por la noche. Y las condiciones ambientales en tu habitación, como la sequedad del aire, pueden irritar tu tracto respiratorio, añadió Chiriboga-Hurtado.
Otras enfermedades, como alergias, asma y reflujo gastrointestinal, también están vinculadas a la tos que tiende a empeorar por la noche por muchas de las mismas razones, dijo. Y algunos medicamentos, como ciertos fármacos para la presión arterial, también pueden hacerte toser más.
Para la mayoría de las personas con un resfriado común, la tos nocturna debería mejorar en cinco a siete días junto con otros síntomas, expresó Chiriboga-Hurtado. En algunos casos, la tos puede persistir durante dos semanas o más. Pero si no mejora después de tres semanas, es buena idea consultar a un médico para verificar si puede haber otra causa.
Cómo dejar de toser por la noche
Afortunadamente, hay varios remedios caseros que pueden ayudar a mejorar los síntomas de la tos y el resfriado por la noche. Hijano generalmente recomienda que bebas más líquidos durante el día para mantener la mucosidad más ligera y minimizar el goteo posnasal cuando te acuestas. Tomar un baño caliente, usar un spray nasal de solución salina o enjuagar la nariz con una olla neti antes de acostarte también puede aligerar la mucosidad, y estos son especialmente útiles para niños pequeños que no pueden sonarse la nariz por sí solos, expresó Hijano.
También puedes considerar usar un humidificador por la noche para mantener las vías nasales hidratadas. La investigación ha demostrado que mantener las habitaciones a un nivel de humedad de aproximadamente el 40 al 60 % reduce la transmisión de virus respiratorios y puede aliviar síntomas como la tos o la congestión cuando estás enfermo.
Intenta elevar la cabeza con algunas almohadas adicionales para ayudar a drenar la mucosidad mientras duermes. Para los bebés, utiliza una cuña debajo de su colchón o inclina un lado de su cuna, recomendó Hijano, porque las almohadas no se consideran seguras para los bebés pequeños.
Para adultos, los supresores de la tos que contienen dextrometorfano pueden proporcionar alivio al reducir el impulso de toser. Los expectorantes para la tos, como los medicamentos que contienen guaifenesina, pueden ayudar a aflojar la mucosidad, facilitando su expulsión. Estos están disponibles como medicamentos independientes o en forma de combinación de medicamentos para la tos y el resfriado. Algunos productos combinados también incluyen antihistamínicos, que pueden aliviar la congestión nasal y reducir el goteo posnasal. Puedes evitar los productos que contienen fenilefrina, ya que un panel de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, en inglés) encontró recientemente que no es efectiva para reducir la congestión nasal.
Otra opción es usar pastillas para la tos o miel, que pueden ayudar a evitar que tu garganta se reseque e irrite, expuso Chiriboga-Hurtado.
“Toser puede ser muy perturbador para el sueño. Y el sueño es esencial para recuperarnos”, dijo. “Así que todo lo que puedas hacer para ayudarte a descansar te ayudará a recuperarte más rápido”.
Traducido por José Silva